Franz J.T. Lee, febrero de 2005
Venezuela: Amamos a Gandhi y a Martin Luther King, pero a la Verdad liberadora la amamos mucho más
El
Reverendo Dr. Martin Luther King Jr. se encuentra una vez más
en los titulares internacionales, también aquí en
Venezuela. Recientemente, el 30 de enero de 2005 en el Foro Social
Mundial celebrado en Porto Alegre, Brasil, el Presidente Venezolano
Hugo Chávez Frías elogió a los Estados Unidos de
América como “un país de héroes, soñadores
y luchadores, el pueblo de Martin Luther King,... “.
Pero
¿quien era King realmente y de qué se trató su
filosofía política y social? ¿Qué podemos
aprender de él para nuestras luchas revolucionarias? ¿Será
que King formó parte de una especie de “teología
de liberación” mezclada con no-violencia Gandista y con
un toque de desobediencia civil? ¿Todavía es válida
tal política liberadora hoy día, en la época del
globofascismo avanzando, con los ataques agresivos estadounidenses
contra Venezuela y América Latina?
Para
aquellos en Venezuela e incluso en los EE.UU. mismos, que saben muy
poco sobre Martin Luther King Jr. (15.01.1929 - 04.04.1968), sobre su
vida y su lucha política, resumiremos en lo siguiente de
manera crítica algunos datos biográficos en cuanto a
sus esfuerzos políticos liberadores.
En
los años 60, durante la época de las manifestaciones
anti-imperialistas contra la Guerra de Vietnam y contra la
discriminación social, el racismo y el apartheid en los EE.UU.
y a escala mundial, King era un icono internacional, adorado por
muchos liberales, demócratas y revolucionarios alrededor del
planeta.
Por cierto, King
tiene su justo lugar dentro de las luchas de liberación
históricas en los EE.UU. y lo honramos por todas sus
contribuciones humanistas y amantes de la paz hacia un futuro feliz
para la humanidad. Como sacerdote Cristiano intentó de parar
al homo homini lupus norteamericano con el calor humano, con
oraciones benévolas e incluso arrodillándose ante los
amos, señores todopoderosos y perros de la guerra yanqui. Hizo
sus mejores esfuerzos y estamos seguros que era lo máximo que
pudo hacer. King terminaba con una época de liberación
no-violenta e introdujo la era de la auto-defensa emancipadora
moderna.
Sin embargo, el
hecho de que King no estudiaba ni estaba en condiciones de estudiar
profundo y científicamente la economía política
global, la filosofía revolucionaria, la revolución
mundial permanente, las luchas de clase, el capitalismo, el
colonialismo y el imperialismo, no significa que nosotros tenemos que
hacer lo mismo, cometer los mismos errores fatales y de esta manera
deslumbrarnos con acciones diarias pacifistas y reformistas y
vendarnos con cosmovisiones idealistas y osificadas y con verdades
absolutas.
En el caso de
King, la realidad histórica concreta capitalista ha confirmado
una vez más que el experimento noble, humano y político
del Gandhismo simplemente no tiene futuro revolucionario ante la
globalización moderna, ni en Venezuela, ni en la India y mucho
menos en los EE.UU. mismos.
King
nació en Atlanta, Georgia y sus padres eran Alberta Williams
King y Martin Luther King Sr., de profesión sacerdote. Con 15
años de edad estudiaba en el Colegio Morehouse, donde se
graduó de bachiller en sociología en 1948. Luego
estudiaba en el Seminario Teológico Crozer de Chester,
Pennsylvania, donde se familiarizó con la filosofía
no-violenta de Gandhi; allí obtuvo el título de
bachiller en Divinidad en 1951. En la Universidad de Boston estudiaba
Teología Sistemática y obtuvo su Ph.D. en 1955.
Desde
1955, su verdadera lucha política contra la segregación
Apartheidista en los EE.UU. comenzó con el famoso boicot de
los buses de Montgomery, cuando King y otros sacerdotes fundaron la
Conferencia del Liderazgo de los Cristianos del Sur (SCLC), que
organizaba protestas a favor de los derechos civiles a través
de todo el Sur de los EE.UU.
Cuando
lo atacaban, el Estado estadounidense no lo defendió, al
contrario, a pesar de sus protestas Gandhistas no-violentas, King
recibió numerosas amenazas violentas por parte de grupos
derechistas, radicales y terroristas. De hecho, una vez bombardearon
su propia casa. En 1960, cuando nacieron los movimientos
estudiantiles internacionales radicales, King mismo participó
en manifestaciones estudiantiles no-violentas pacíficas de
tipo “sit-in”. En octubre de 1960 lo arrestaron y lo
condenaron a prisión. Después de unas protestas a nivel
nacional finalmente intervino el entonces candidato presidencial John
F. Kennedy y King fue puesto en libertad.
El
28 de agosto de 1963 se organizó una gigantesca “Marcha
hacia Washington D.C. en Defensa del Empleo y la Libertad” y en
el Memorial Lincoln, King dio su famoso discurso “Tengo un
Sueño” que fue trasmitido a través de la
televisión; lo acompañaban unos 250.000 Norteamericanos
negros y blancos.
La
burguesía comenzó a tomar cuenta de su liderazgo
carismático y trató de pararlo mediante la fama
internacional, así que en 1963, en el semanario “Time”
le dieron el título de “Hombre del Año” y
en 1964 le fue otorgado el Premio Nóbel de la Paz. Por cierto,
eso no fueron precisamente “honores” de la clase obrera
para una práxis revolucionaria y una teoría
emancipatoria.
Sin embargo,
al mismo tiempo el gobierno estadounidense pasó el “Civil
Rights Act” (Ley de los Derechos Civiles) de 1964, que al menos
sobre el papel reconoció los derechos civiles de la población
afro-americana; esto no fue suficiente para parar muchos de ellos,
que se volvieron impacientes con los métodos de la resistencia
no-violenta de King y pronto después armaron escándalos
en Watts y Harlem.
Después
de la marcha de Selma, Alabama, donde King trataba de parar la
violencia estadounidense arrodillándose y orando, apareció
en el horizonte revolucionario otra estrella popular, su propio
opuesto, Malcolm X y el movimiento del “Poder Negro”, y
los “negros” urbanos empezaron de favorecer al
nacionalismo Negro en vez del pacifismo Gandista de King. A esta
tendencia la trataremos en otro comentario separado.
El
sueño noble y pasivo de King terminó igual al de su
maestro Gandhi, no comprendió lo que Georges Sorel afirmó
categóricamente en cuanto a la violencia global, generada por
el sistema capitalista imperialista: Nosotros no inventábamos
la violencia o el “terrorismo”; por orden social y del
Estado nacimos en violencia, vivimos en violencia y moriremos en
violencia, salvo si en auto-defensa global y con todos los medios
necesarios logramos erradicar completamente el orden mundial violento
a través de la práxis y teoría revolucionaria
militante.
El 3 de abril de
1968 en Memphis, Tennessee, King se dirigió a una reunión
de trabajadores de salud urbana en huelga y así dio su último
discurso: “Fui a la cima de la montaña”.
El
próximo día, mientras miraba una última vez a la
realidad terrorista norteamericana desde el balcón de su
motel, fue asesinado a tiros. El 8 de junio de 1968 un tal James Earl
Ray, fue arrestado en Londres, Inglaterra y poco después
condenado a 99 años de prisión. De esta manera terminó
el experimento de la resistencia pasiva Gandista en la “Gran
Sociedad”.
Breves
Reflexiones sobre la Filosofía Social Religiosa de
King
Estudiando los
acontecimientos políticos y los discursos y escritos de King
en los EE.UU. durante los años 60, Venezuela se va a dar
cuenta que hoy estamos en una situación similar a la de los
marginados, los Afro-Americanos, no sólo del siglo pasado,
sino incluso más de hoy. Viviendo junto con los “Latinos”
y otros parías del “Tercer Mundo” en los EE.UU.,
son explotados, dominados y discriminados sin piedad y además
masacrados como carne de cañón en las guerras mundiales
de Bush.
Según King,
en la auto-defensa política no-violenta, la cual también
la experimentábamos aquí en Caracas el 11 de abril de
2002 y después, existe un elemento dinámico lo cual
llamó “fuerza del alma”; Wilhelm Reich lo llamaría
el Orgon, la energía vital. Para todos nosotros aquí en
Venezuela, King ha generado ciertas preguntas revolucionarias:
¿De
qué manera nosotros, como pueblo amante de la paz que somos,
podemos caracterizar la alternativa revolucionaria entre la invasión
y el terrorismo yanqui y la no-violencia democrática
Bolivariana de nuestra lucha por la libertad y la emancipación?
¿Qué
pronosticaron Gandhi y King adonde llevará la resistencia
social violenta? Mirando atrás, a través de las décadas
pasadas y mirando a la situación mundial actual y al futuro
fascista Orweliano ¿fueron pronosticadores confiables?
Además
¿el Gandhismo será capaz de funcionar dentro de una
sociedad de clases, como son los EE.UU., sin libertad de opinión
y de prensa? ¿Funcionaría aquí dentro del
contexto local, nacional e internacional del Control Mental, la
guerra de las ideas y las campañas de desinformación?
En
su filosofía social King adoptó la esencia religiosa
del sufrimiento del “Satyagraha” de Gandhi, especialmente
en lo siguiente:
“Con
la aplicación del Satyagraha en sus fases tempranas descubrí,
que la búsqueda de la Verdad no se puede imponer al enemigo
por medio de la violencia, sino que hay que destetarlo de sus errores
a través de la paciencia y la simpatía. Lo que para uno
parece la verdad, para otro puede ser el error. Paciencia significa
auto-sufrimiento. Entonces la doctrina llegó a significar
defensa de la Verdad, no a través de la imposición del
sufrimiento al enemigo, sino a uno mismo.
El
Satyagraha y sus retoños, la no-cooperación y la
resistencia civil, son nada más que nombres nuevos para la ley
del sufrimiento”.
(Véase:
<http://meadev.nic.in/Gandhi/satyagrahya.htm>)
De
hecho, la filosofía de Gandhi y de King prohíbe
totalmente la posibilidad de tumbar al tirano estadounidense mediante
la fuerza revolucionaria. Tenemos que convertir a la pandilla de Bush
mediante el diálogo, la reconciliación, las
conversaciones de paz y las oraciones:
“El
movimiento de la no-cooperación no-violenta no tiene nada en
común con las luchas históricas de liberación
Occidentales. No se basa en la fuerza brutal o en el odio y su meta
no es destruir al tirano. Es un movimiento de auto-purificación.
Por lo tanto busca convertir al tirano... “ (ibid.).
King
llamó esto la “fuerza del alma”, el “poder
de la no-violencia”. Es cierto que el Poder Ciudadano
Bolivariano puede aprender mucho del Gandhismo, sobre todo de lo que
no deberíamos hacer o pensar en nuestras luchas
revolucionarias contra el globofascismo terrorista violento.
Aquí
en Venezuela y América Latina amamos a Gandhi y amamos a
Martin Luther King, pero a la Verdad liberadora la amamos mucho
más.
(Para más
información, véase los siguientes libros de Martin
Luther King Jr.: Stride Toward Freedom: The Montgomery Story (1958);
Why We Can’t Wait (1964); Where Do We Go from Here: Chaos or
Community?
(1967).
http://afroamhistory.about.com/cs/martinlutherking/a/bio_mlk.htm