Franz J.T. Lee, enero de 2005
La Diseminación del Conocimiento de la Verdad es el Poder Ciudadano de Venezuela
¡Conocimiento es
Poder! Esto ya lo sabían los “Siete Sabios” de
Grecia Antigua. La vanguardia de la Ilustración, especialmente
Francis Bacon con su empiricismo, positivismo y pragmatismo y la
clase burgués capitalista democrática mecánica
materialista emergente también confirmaron este
eslogan.
Conocimiento
y Poder - supuestos sinónimos - tienen otro sine qua non
secular: gnothi seauton, conócete a ti mismo, escrito en el
Templo de Apolo, en cuya sombra Aristóteles enseñó
la antigua práctica y teoría de la política a
sus discípulos y estudiantes.
Si
el mito religioso de Jesucristo tiene alguna veracidad histórica
terrenal, entonces casi dos milenios atrás, este enfatizó,
que el Conocimiento de la Verdad - y no la Verdad misma - nos
liberará, nos emancipará. Pero este Conocimiento tiene
que ser conocido y diseminado a escala mundial.
Dentro
del contexto de las campañas de desinformación, las
guerras de las ideas a nivel global y del “Dominio de Pleno
Espectro” estadounidense, a través de la última
década, la Venezuela revolucionaria ha experimentado las
fuerzas energéticas y los resultados creativos de la
conversión de la realidad concreta en verdad social, de la
verdad social en conocimiento histórico y del conocimiento
histórico en Poder Ciudadano.
Sólo
de esta manera sobrevivió los ataques poderosos y despiadados
del golpe de Estado y del sabotaje petrolero de 2002, y logró
de ganar una serie de victorias electorales decisivas, democráticas
y constitucionales en línea. Todas esas victorias legitimaron
al Presidente Hugo Chávez y de hecho a la Revolución
Bolivariana de Venezuela. ¡Esto es algo que el planeta entero
debería saber, especialmente el mundo de habla inglés,
árabe, ruso y chino!
Sin
embargo, de la misma manera en la cual podemos utilizar la
tecnología, el conocimiento y el poder para pensar y hacer un
arco y una flecha para cazar un animal y así alimentarnos y
por otro lado para fabricar valores de uso al servicio de la
sobrevivencia humana, también podemos abusar de ellos como
instrumento de guerra para propósitos de la destrucción
natural y humana, por ejemplo, como el Proyecto HAARP.
Hoy
día, en un tiempo del globofascismo en avance, la tecnología
y la “información” se utilizan extensivamente
precisamente para esos últimos fines. De hecho, sin una práxis
y teoría revolucionaria bien clara, se ha vuelto prácticamente
imposible de diferenciar entre la virtualidad y la realidad. Aquí
en Venezuela hemos tomado cuenta de que a través del último
medio milenio de la conquista permanente de Sudamérica y del
Caribe no hay nada que los amos coloniales y neocoloniales temen más
que la Verdad fluyente y rebosante; la Verdad es el talón de
Aquiles del capitalismo, imperialismo y corporatismo; es el clavo
revolucionario en el ataúd del mundo estadounidense y de la
hegemonía fascista.
Esto
es la razón de por qué el Hermano Mayor con sus
mentiras mayores, por qué el Newspeak (Nuevo Lenguaje), por
qué los cuentos de horror y las falsedades obvias fueron y
están siendo diseminados a nivel global a través de los
medios masivos nacionales e internacionales, que a su vez son
controlados por las poderosas agencias de noticias, por gigantescas
corporaciones y por los estados metropolitanos. Todos aquellos son
respaldados por la CIA, el Pentágono y el Giga-Capital y son
libres de diseminar cualquier cosa que le sirve al globofascismo en
avance.
Nuestro
contra-ataque intelectual es similar al trabajo de Sísifo. El
Gobierno Venezolano sabe esto y ha lanzado un montón de
medidas informativas o mejor dicho exformativas, para contrarrestar
ese mar de Control Mental mortal y fatal, que ya ha logrado de
intoxicar a millones a escala mundial. Las mentes y “almas”
de millones están amenazadas de toda clase de epidemias
psicológicas, psíquicas, psicosomáticas y
patológicas. Especialmente en los EE.UU., la mayoría de
la población ya está sufriendo los efectos letales de
la alienación humana, y padece de trastornos mentales
crónicos, desde el hombre común y corriente hasta los
VIP del Poder Estadal; desde la disonancia cognitiva contagiosa hasta
la disociación psicótica crónica y hasta la
megalomanía militar virulenta.
Estamos
en una época de ideas revolucionarias permanentes, no
confeccionadas en las torres de marfil ideológicas de los
“think-tanks” que formulan ideas como un “Proyecto
para Un Nuevo Siglo Norteamericano” o cómo declarar una
Guerra Global Total de destrucción masiva. Es la época
de la acción y del pensamiento emancipatorio, de la práxis
que crea y de la teoría creativa. En otras palabras, el tiempo
está maduro, o para resucitar o para rejuvenecer la “Cuarta
Internacional” de Trotski, o incluso para fundar la “Quinta
Internacional”, la verdadera última, el Éxodo de
todos los modos de producción y de destrucción.
Sin
embargo, como no queda mucho espacio y tiempo y tampoco mucha vida en
este nuestro planeta tierra, nuestros objetivos concretos, nuestros
subjetivos teóricos y nuestros transjectivos emancipatorios
tienen que ser claros como un cristal y más rápidos que
las ondas escalares.
Ya
no tenemos 500 años para liberarnos del absolutismo
feudalista, del militarismo capitalista y de la megalomanía
corporativa - quizás nos quedan sólo 5 años o
tal vez 50, máximo. El futuro de nuestros nietos es una
realidad dura y oscura.
Comparada
con todas las revoluciones sociales contra el
capitalismo-imperialismo, la Revolución Bolivariana se
encuentra en un ambiente global único y transhistórico,
en un mundo de ni reforma ni revolución, de ni todo ni nada,
sino de pasar el punto de no regreso hacia un Éxodo verdadero
de la destrucción productiva y de la producción
destructiva, hacia la emancipación humana creativa, hacia la
humanidad creativa emancipatoria.
Para
lograr este “milagro” global, donde nuestro Conocimiento
actual refleja científico y filosóficamente el juicio
final, el Apocalipsis, el Armagedón dentro de los próximos
años, es más fácil decirlo que hacerlo.
Sin
embargo, sabemos que en la Naturaleza siempre es más oscuro
antes del Amanecer, que cada nube social oscura tiene su
revestimiento plateado, y que si sembramos el viento revolucionario,
vamos a cosechar huracanes reaccionarios; parece que en este momento
la Revolución Bolivariana se encuentra en la calma de la
reacción nacional e internacional, no obstante, en realidad
esto es sólo la calma temporal antes de la tormenta
emancipatoria global.
¿Qué
hacer?
Respuesta:
La continuación lógica de los tres “milagros”
anteriormente mencionados.
a)
armar al pueblo y popularizar al ejército, para poder
contrarrestar cualquier golpe político o militar y prevenir
otros asesinatos políticos por parte de la CIA y de los
paramilitares;
b)
vigilar y resguardar nuestro latido de corazón económico,
que es PdVSA, y evitar cualquier nuevo acto de sabotaje; además
reconquistar políticamente a Zulia, que podría ser el
punto nodal para una futura intervención militar
estadounidense;
c)
olvidarnos del triunfalismo miope y garantizar la victoria política
electoral para la Revolución Bolivariana en el 2006.
No
obstante, hay un cuarto elemento de práxis revolucionaria que
de una u otra manera fue olvidado hasta ahora: la Campaña
Informativa Revolucionaria Permanente Global contra la actual Guerra
Internacional de las Ideas y contra la Maquinaria de Guerra
Estadounidense para la Desinformación, contra Fox News, CNN,
etc. del calibre de Hitler, Goebbels y Goering.
En
este campo el Internet - mientras sigue existiendo - juega un papel
central. ¿Cómo es posible que no hay traducciones en
Inglés de la información central sobre Venezuela? La
respuesta es bastante sencilla: falta de fondos, falta de
financiamiento.
Para
informarse, todo el mundo obligatoriamente tiene que saber leer en
Inglés. Solamente una pequeña fracción, sobre
todo aquí en América Latina, es capaz de leer las
noticias en Castellano. Una de las máximas prioridades de
“profundizar la revolución” y de la “revolución
dentro de la revolución”, debe ser la ayuda de páginas
web en idioma Inglés ya existentes y suficientemente
experimentadas, que han jugado un rol muy importante cuando se
trataba de defender la revolución en el exterior.
De
la noche a la mañana brotan las páginas web
contrarrevolucionarias igual que hongos en todas partes del Internet,
corrompiendo y envenenando las mentes de millones y ellos tienen a su
disposición millones de dólares.
Este
asunto revolucionario, la diseminación de conocimiento sobre
la Verdad en Venezuela, es decir, nuestra defensa “ideológica”
a nivel internacional, necesita atención prioritaria. De modo
contrario seremos inundados por el próximo golpe
contrarrevolucionario contra Venezuela, que será más
violento que nunca. El mundo tiene que ser informado a tiempo para
poder solidarizarse con Venezuela y para darles a todos los
movimientos revolucionarios a nivel global la solidaridad necesaria
de la Revolución Bolivariana.
Esto
es una característica significativa de la revolución
permanente. La diseminación del Conocimiento, del Conocimiento
de la Verdad, a nivel nacional e internacional, significa Poder
Ciudadano.