Franz J.T. Lee, enero 2009
En cuanto a Chávez,
Bush y Obama están bien alineados
¿Gaza
es el futuro camino hacia el socialismo?
"Tenemos que regresar a
casa, pacíficamente, a jugar con nuestros hijos, hacer el amor
y no la guerra durante un mes y, después, podemos ver quienes
son los soberanos de este mundo."
El extravagante
festival de inauguración presidencial estadounidense de los
“150 millones de dólares” no puede ocultar la
actual profundización de la recesión económica
mundial, y tampoco las derivaciones alienadas cancerosas o las
peligrosas contradicciones beligerantes de un posible fascismo
mundial en camino. La horrenda masacre de Gaza de niños y
mujeres inocentes, donde se utilizaron armas sofisticadas de la
tortura y la agonía humana, era una especie de pararrayos
político para desviar la atención pública
mundial, lejos de las verdaderas causas del genocidio de Gaza y de
más atrocidades en el futuro. Además, la experiencia
histórica indica que, durante todos los ciclos económicos
de depresión, existe una tendencia hacia las guerras
mundiales; en latencia, una pesadilla para el sistema. También
en todo el mundo tienden a estallar posibles revoluciones sociales
anti-capitalistas y los eslabones más débiles de las
cadenas imperialistas metropolitanas empiezan a erosionar y a
romper.
Actualmente, más que durante el mes pasado, la
corrupción, la especulación y la quiebra son moneda
corriente, la crisis se agrava inexorablemente; en todo el planeta
quiebran los grandes bancos, diferentes sectores del mercado mundial
se derrumban y el crecimiento económico se estanca, poniendo
en peligro apocalíptico no sólo grandes economías
como las de Japón y EE.UU., sino también y de hecho, el
orden mundial entero.
El presidente electo Barack Obama no
tenía nada que decir con respecto a la masacre de Gaza,
llevado a cabo por su fiel aliado del Oriente Medio, debido a que dos
presidentes estadounidenses no pueden expresar sus opiniones de clase
simultáneamente. Sin embargo, lo que es válido para
Poncio no era válido para Pilato: con referencia al presidente
Chávez de Venezuela, antes de que se efectuó este show
tan opulento, al unísono, tanto Bush como Obama cantaron la
misma vieja canción del terrorismo.
El Día de
Inauguración, 20 de enero de 2009, la inherente recesión
estructural no se dejó impresionar por la "monarquía”
aristocrática feudal estadounidense, es decir, por las fiestas
militares e industriales hasta la saciedad de la base de la clase
social del nuevo presidente democrático. No participó
en ese enorme pan et circenses, por el contrario, mientras que las
celebraciones estaban en plena marcha, en Wall Street, y en otras
partes, los mercados bursátiles se redujeron progresivamente y
todos los bancos más grandes sufrieron graves pérdidas.
El
sitio Web de los Socialistas Mundiales (WSWS) resumió este
fiasco de la siguiente manera:
"El Dow Jones cerró
con una baja de 4 por ciento, perdiendo 332 puntos para situarse por
debajo de la marca de 8000 a 7949. También fueron muy por
debajo el Indice Standard & Poor's 500 (-5,3 por ciento) y el
Indice Nasdaq Composite (- ,8 por ciento). El Dow y S & P se
encuentran ahora en mínimos desde hace dos meses, en gran
medida borrando el rebote que le siguió a la elección
presidencial de noviembre, donde los mercados anticiparon un paquete
de estímulo de la administración Obama. "El
optimismo de que el gasto del gobierno reactiva la economía
[ha] evaporado", informó Bloomberg News.
".
http://www.wsws.org/articles/2009/jan2009/econ-j21.shtml
Pero
esto no fue todo:
"El sector financiero tuvo el mayor
éxito ayer, con el S & P 500 cerrando el 17 por ciento a
su nivel más bajo en 13 años. Bank of America cerró
el 29 por ciento más bajo, Wells Fargo perdieron el 24 por
ciento, JPMorgan Chase disminuyó un 21 por ciento, y Citigroup
disminuyó 20 por ciento. El banco con sede en Boston, State
Street, el más grande gerente de dinero institucional a nivel
mundial, cayó 56 por ciento después de que anunció
$ 6,3 mil millones de pérdidas no realizadas en su cartera de
inversión, chocando a los analistas financieros que habían
considerado las operaciones financieras del State Street entre los
más seguros del mercado".
En Gran Bretaña y
en el continente europeo los principales bancos sufrieron pérdidas
similares, fueron sacudidos por la crisis sistémica
estructural del capitalismo mundial.
Lo que esto significa
para los trabajadores metropolitanos, la Comisión Europea nos
lo dijo sin ningún tipo de flores: desempleo en los 16 países
que utilizan el euro, que podría alcanzar el 10 por ciento a
finales de este año. Por supuesto, esto ya está siendo
acompañado por los despidos, y muy pronto por la reducción
de los salarios, de prestaciones sociales y por la subida de los
impuestos para rescatar al Estado capitalista y sus respectivos jefes
de la clase dominante.
En realidad, de lo que el imperio
Murdoch no nos informa, como en el caso de la ex-potencia mundial, la
Unión Soviética, es la posible disolución, la
desaparición de los Estados Unidos de América en el
contexto histórico de la globalización. Para obtener
una idea de esta posibilidad histórica, Christopher Ketcham,
... que no es marxista, sino que es un serio escritor de Vanity Fair,
GQ, Harper’s y otras revistas, ... nos dirá en su
próximo libro de las razones por las que considera que "Los
Estados Unidos deben
acabarse".
http://www.counterpunch.org/ketcham01202009.html
Hace
más de un siglo, en su magnífico trabajo "El
Capital", Karl Marx nos explicó la razón principal
de la actual situación mundial volátil
'transrevolucionaria’. Es sólo la fuerza de trabajo
concreta del ser humano vivo la que produce ganancias, plusvalía
y acumulación de capital. La tecnología muerta, en
forma de máquinas y computadoras no produce ni un centavo de
verdadera plusvalía. Lo que Marx ha llamado la ley tendencial
de la evolución de la composición orgánica del
capital ahora se está convirtiendo en la espada de Damocles
que cierne encima de capitalismo mundial. Basta dar una mirada a lo
que se produce mayormente en el mercado mundial, para descubrir el
talón de Aquiles del imperialismo corporativo. Computadoras y
máquinas de guerra no consumen, no realizan capital ni
plusvalía. Destruyen y matan. Producen masacres, My Lai,
Sharpeville y Gaza. Estamos entrando en un modo de producción
de armas de destrucción masiva, de la destrucción de
capital, de la mano de obra, de las posibles guerras mundiales, de la
posible aniquilación de la vida en el planeta Tierra.
Esto
es lo que más de dos millones de trabajadores de Estados
Unidos tienen que tratar de detener en Washington. La próxima
vez, tendrán que marchar a Washington para celebrar su
victoria de clase, el fin de un modo de destrucción, de
genocidio, tortura, masacres y terrorismo.
De hecho, a partir
de entonces deben regresar a su casa, pacíficamente, para
jugar con sus hijos, para hacer el amor y no la guerra durante un mes
y, después podemos ver que son los soberanos de este mundo.
Esto es mucho más fácil decirlo que hacerlo, de verdad,
si esto sería posible organizar a escala mundial, entonces no
sería necesario hacerlo en primer lugar. Sin embargo, tememos
que la emancipación humana en la tierra tomará otro
camino, un camino que nuestros amos han tomado durante milenios, el
mismo camino el cual ahora están eligiendo por nosotros en
Gaza y en otros lugares.
Para nosotros, aquí en
Venezuela, la conciencia de clase para erradicar todos los modos de
producción, es decir, la destrucción humana, lógica,
científica, filosófica y sabiamente, tiene que ser
superior a todo lo que la burguesía jamás hizo, pensó
y superó. Si esto aún sería posible, sólo
las estrellas titilantes podrían decirnos.