Franz J.T. Lee, mayo de 2006
Colón llegó tarde: presencia africana pre-colombina en las Américas
Según la
historia oficial Cristóbal Colón "descubrió"
América. Muy pocos de nosotros aquí en las Américas
cuestionamos este "hecho" histórico. Estamos felices
de pertenecer al "Nuevo Mundo", de haber sido
"descubiertos" y de tener nuestro día feriado, el
"Día de la Raza".
Por toda América
nuestros verdugos oligárquicos han levantado estatuas (incluso
un gran faro en República Dominicana) al gran Colón, el
agente secreto del primigenio capital italiano, y si alguien de
manera concreta trata de tumbar esta farsa a lo largo de América
le espera la cárcel . No podemos estar en contra del ALCA y al
mismo tiempo defender las estatuas a un engaño, de Cristóbal
Colón. Como en el caso de las brutales y tortuosas corridas de
toros, una revolución cultural debe resolver esta obvia
contradicción dentro de la Revolución Bolivariana.
En
realidad Colón no descubrió nada en absoluto, aun así
por medio de la educación, la socialización y la
diseminación de mentiras por parte de los medios de
comunicación masivos internacionales se construyó a su
alrededor el más grande mito capitalista, colonial e
imperialista de todos los tiempos, una gran mentira mucho mayor que
los fantásticos cuentos relacionados al "Reichstagsbrand",
"Pearl Harbor", la "Voladura de las Torres Gemelas"
y a "Chávez el Gran Dictador".
Mientras que
los europeos prácticamente aun vivían en los árboles,
siglos antes de que Colón naciera o se hubiera metido en un
barco ... en expediciones a bordo de flotas inmensas ... navegantes,
científicos y filósofos africanos ya habían ido
a América, ya habían intercambiado experiencias, ideas
y culturas, habían comerciado y vivido entre los pueblos
indígenas de allí; de tal manera habían influido
el modus vivendi de los indígenas americanos de una forma u
otra, o vice versa. Y aun así, a lo largo de la historia
moderna no existe pueblo sobre la Tierra que haya sido (y todavía
sea) más explotado, dominado, discriminado, humillado y
masacrado que el pueblo africano.
La presencia africana en las
Américas se remonta tan lejos como la América
"pre-histórica", esto es "tan lejos como la
época entre 40000 y 6000 A.C." Otros pueblos africanos
relativamente modernos de "Egipto y Nubia-Kemmiu llegaron a las
Américas alrededor de 1200 A.C.".
(Para estos datos,
ver la historia de portada de la revista NEW AFRICAN (Londres), "They
Came Before Columbus" (Ellos vinieron antes que Colón),
Enero de 2001, N° 392, páginas 16-20.)
Alrededor de
1307 D.C.... es decir mucho antes que Colón ... el famoso
pueblo Mandinga del África Occidental entró al ALBA
originario, comerció con los pueblos indígenas
americanos.
Lo que acabo de mencionar ... desconocido para una
inmensa parte de la población mundial desde hace siglos ya,
debido a un mecanismo de control mental y de pensamiento
metropolitano racista y arrogante ... no es noticia a nivel mundial.
De hecho, un libro con un buen trabajo de investigación,
"Ellos vinieron antes que Colón", escrito por Ivan
van Sertima, publicado ya en 1977; prácticamente pasa
inadvertido en la prensa mundial. Por supuesto, cómo podrían
los administradores y amos de esclavos de antaño explicar al
mundo que ellos no esclavizaron y deshumanizaron a "salvajes",
"monos" y estúpidos "mandriles" africanos
negros, sino a seres humanos altamente educados y cultos y no
violentos.
¡Es horrible ver cuántas mentiras y
engaños han sido taladrados en nuestras mentes incocentes!
El
autor afro-caribeño Richard B. Moore en su libro "La
Importancia de la Historia Africana" explica cómo es que
los "eruditos" europeos han falsificado la historia
africana con el fin de inculcar una mentalidad esclava y complejos de
inferioridad que, como en el caso de la religión cristiana, a
lo largo de la historia han servido a los intereses explotadores y
dominadores de clase capitalistas europeos.
Existe evidencia
histórica definida que entre los años 1307 y 1312 de
nuestra era flotas Mandingas de África Occidental habían
navegado a América y luego habían regresado a África.
En el año 1324 de nuestra era el famoso emperador Mandinga de
Malí, Mansa Kankan Musa I, en su camino a La Meca, hizo escala
en El Cairo y fue entrevistado por el eminente historiador islámico
del siglo XIV, Al-Umars, a quien el emperador le relató su
subida al "poder" y que "sus predecesores habían
lanzado dos expediciones desde el África Occidental para
descubrir los límites del Océano Atlántico".
(New african, Ibid.)
Al-Umars escribió: "Le
pregunté al Sultán Musa cómo fue que llegó
el poder a sus manos ... . (Él contestó:) ...
'Pertenecemos a una casa que transmite el poder de manera hereditaria
... el gobernante que me precedió no creyó que era
imposible descubrir los límites del mar circunvecino. Él
quería descubrir y persistió en sus planes. Él
tenía alrededor de 200 naves equipadas y las llenó de
hombres, y el mismo número de naves llenas de oro, agua y
suministros en cantidades suficientes para durar por años.
Él
les dijo a los comandantes que sólo regresaran cuando hubieran
alcanzado los extremos del océano o cuando hubieran agotado su
comida y su agua. Ellos partieron ... Finalmente, reapareció
un solo barco y le preguntamos a su capitán acerca de su
aventura.'"
Él le contó al Sultán
acerca de su largo viaje y cómo fue que finalmente entraron en
algo semejante a un río con violentas corrientes. Él
era el último de la fila y vio cómo las otras naves
desaparecían. Él regresó para contar su
historia.
Sin embargo, " 'el emperador no quiso creerle
y equipó alrededor de 2000 navíos más y me
confirió el poder y partí con su compañera y los
demás al océano. Esa fue la última vez que lo ví
a él y a los otros ...' "
Cuánto hay de
verdad en esta historia nunca lo sabremos de manera segura, pero
ciertamente muestra la típica curiosidad filosófica, el
espíritu de aventura humano hacia lo desconocido y la audiacia
científica de los africanos. Existe más evidencia que
su sucesor, Musa II, envió otra expedición que
probablemente llegó a Arilles, que colinda con el Mar Caribe y
el Golfo de México.
Sin embargo, doscientos años
después de la visita de Musa I a La Meca, Cristóbal
Colón en sus "Journals" (Diarios) ... de que solo
quedan fragmentos y citas, rescatados por el fraile Bartolomé
de las Casas ... personalmente testificó acerca de la
presencia de las expediciones Mandinga a las Américas.
Según
el "New African", Colón escribió que "las
flotas mercantes de África Occidental periódicamente
partían de la costa de Guinea y navegaban a la América
Meridional con oro y otras mercancías; (los Mandinga)
introdujeron el arte de la aleación del oro."
(ibid.)
¿Cómo es posible que los "eruditos"
y estudiantes europeos y americanos no hayan visto y leído los
siguientes datos escritos y publicados en estos "Diarios"?
Colón
escribió: "Los indios trajeron pañuelos de
algodón, confeccionados muy simétricamente y trabajados
en colores semejantes a aquellos que se traen de Guinea, de los ríos
de Sierra Leona y sin diferencia alguna... Los Mandinga comerciaron
con oro y tela llamada "almaizar"... (New African,
ibid.)
Por lo tanto, incluso el mismo Cristóbal Colón
atestiguó que los Mandinga habían llegado a América
mucho antes que él. Nosotros no demoramos mucho más en
revelar este engaño transhistórico. Mientras tanto, han
surgido muchas otras pruebas de la presencia africana "pre-colombina"
en las Américas.
Ya los evangelios de María
Magdalena y de Judas nos han despertado de siglos de sueño
colonial e imperialista. Esperamos que alguno de los muchos mesías
antiguos nos sacuda de esta religión monoteísta
oscurantista, y nos catapulte hacia el Eros y la creatividad
emancipatorios del Tercer Milenio.
Lo importante es demostrar
las profundas raíces revolucionarias auténticas de
América y el Caribe en África, y viceversa. La
Revolución Bolivariana tiene mucho que aprender de África;
no sólo vudú u obeah, sino alcanzar de manera humana
los océanos, las estrellas. Igualmente, África
urgentemente debe declararse en solidaridad con Chávez, con
Venezuela, con la Revolución Bolivariana.