Franz J. T. Lee, agosto de 2005



Barbarie Total, Alienación Total: La intervención armada yanqui condenará a Venezuela a un futuro radioactivo!



El comentario de Oscar Heck en Vheadline “Un asunto de vida y muerte! Venezuela tiene que mantener los militares estadounidenses en la raya...”, describe de manera urgente, lo que habíamos advertido en tantos escritos desde el comienzo de la Revolución Bolivariana en Venezuela.
http://www.vheadline.com/readnews.asp?id=45533

Oscar Heck escribe: “Antes de leer este artículo, pido a los lectores de estar preparados para enfrentarse con algunas fotos e información altamente perturbadoras, información, que finalmente sale a la luz, información que gente como yo ya conocemos desde algún tiempo, información, que fue ocultada a propósito, información, que cada uno de los seres humanos de este planeta debería conocer. Es un asunto de vida y muerte!”

Hay que leer este artículo de Oscar Heck (véase URL), seguir los hiper vínculos y ver las fotos.

Inter alia, hemos advertido sobre HAARP, sobre armas electromagnéticas, que fueron utilizados en Fallujah y siguen siendo utilizados en Irak, sobre armas de uranio empobrecido, sobre SIDA, Ebola, “Gripe Española”, “Gripe de Pollo”, y otras armas biológicas. Desenredamos el “Proyecto para un Nuevo Siglo Americano” y otros planes diabólicos para extinguir a millones de trabajadores físicos obsoletos.
http://www.vheadline.com/readnews.asp?id=24592

Advertíamos sobre “Peak Oil” y muchos genios omniscientes nos declararon locos, explicábamos las verdaderas dimensiones de la crisis energética mundial, escribíamos sobre la tecnología de Tesla, la “energía libre”, el “orgón” de Wilhelm Reich, los “Extraterrestres del Pentágono”, los Ovnis, hechos en Los Alamos y sobre la posibilidad real de las armas de destrucción masiva de extinguir pronto o tarde la vida en el planeta tierra.

Ahora, Oscar Heck ha enfocado el venidero Armagedón en todas sus perspectivas mortales. Venezuela, a causa de su relevancia geopolítica y estratégica para los EE.UU. y sus futuras maquinaciones beligerantes, no podrá escapar de la muy cuidadosamente planificada invasión militar, claro, salvo si toda América en unísono logra parar este perverso y fatal acto de megalomanía y suicidio imperialista corporativo.

Los trabajadores y pobres diablos norteamericanos deberían despertar de su complacencia dopada, de su consumismo de prozac y apoyar a la Revolución Bolivariana, defendiendo de esta manera a ellos mismos y a su existencia; si no, les esperan en todo el globo e incluso en los EE.UU. mismos, los gigantescos campos patrióticos de concentración y las cárceles secretas, listas para albergarnos a todos. Nosotros, los millones que nos hemos convertido en “ganado” inútil, somos en realidad los “terroristas árabes”, en la mira de ser masacrados. De hecho, muchos de nosotros somos mentalmente tan controlados, que en las últimas elecciones “democráticas” estadounidenses, millones elegimos al patrón y Santo George W. Bush, nuestro carnicero favorito.

Simplemente no vemos el “menetekel” fascista en la pared y no podemos imaginarnos el Gran Choque, el venidero Holocausto Global.

Muchos planes secretos y proyectos ocultos de los militares y del complejo industrial estadounidense todavía son desconocidos para aquellos serios investigadores que utilizan el todavía “libre” Internet, aunque éste no tiene privacidad y de todos modos el Hermano Mayor posee todas las claves y contraseñas. Sin embargo, como comenta Oscar Heck, la poca información que se filtra sobre proyectos genocidas ya vigentes, es suficiente para causar pesadillas eternas a cualquiera de nosotros.

Guerras mundiales imperialistas, especialmente la actual, denominada “Nueva Guerra” de Bush, que es la peor de todas, tienen características múltiples y aspectos económicos, políticos, militares y sociales. No solamente vienen de la nada, como eventos aislados. Las guerras no hacen estragos sólo para un rato, para después desaparecer en el olvido.

En caso de que tales guerras resistieran las campañas masivas de desinformación (hay que recordar, que la guerra de Irak se ganó y se terminó hace mucho tiempo), entonces proporcionarían el material de investigación para algunos estudiantes sobrevivientes de historia, todos contaminados con uranio empobrecido, que analizan los “hechos” censurados algunos 50 años después y se gradúan con suma cum laude.

¿Qué saben nuestros estudiantes actuales sobre las revoluciones de Argelia, Rusia, Yugoslavia, Vietnam, China o Cuba? ¿Qué es lo que saben sobre la Revolución Americana y Francesa? Qué saben sobre las Guerras Coloniales de Independencia de América Latina, Africa y Asia?

Bien, cada miembro de la especie humana, no importa si recién nacido, joven, o ya viejo y senil, debería saber, de qué se trata la actual guerra mundial, que desde el milenio anterior está en pleno desarrollo y que podría ser la última guerra, que significaría la extinción de la vida en este planeta.

Para los habitantes de Hiroshima y Nagasaki, de hecho significó el fin; para los “condenados”, para los pobres Judíos, Africanos, comunistas y gitanos, en los gulag y campos de concentración de Stalin y Hitler en Workuta, Treblinka, Dachau y Auschwitz, era el Apocalipsis de este entonces.

Para los millones de esclavos africanos, el mundo terminó en la nada, en el fondo del Océano Atlántico o en el infierno norteamericano colonial, en el triángulo de Bermuda del mercado mundial. Para los empleados de las Torres Gemelas - el símbolo de muerte de doble patrón de la megalomanía draculiana estadounidense - era Sodoma, para los Afganos e Irakies, para las madres y niños árabes pobres e inocentes de Fallujah, que fueron vuelto pedazos mediante la “madre de todas las bombas” norteamericana, mediante las mortales balas atómicas de uranio empobrecido, era Gomorra. Para muchos Palestinos y Colombianos, durante ya casi medio siglo, la vida terrenal se ha convertido en un infierno eterno.

Según Oscar Heck:

“Los EE.UU. están utilizando armas nucleares.

Para evadir las leyes y conseguir permiso para el uso de armas de napalm contra los Irakies en la reciente invasión de Irak, los militares estadounidenses (o quien sabe quien) sencillamente cambiaron el nombre del arma y modificaron ligeramente sus ingredientes. De modo similar, el gobierno estadounidense nos ha burlado en cuanto al uranio empobrecido, que fue utilizado en armas contra los Irakies y Afganos en las recientes invasiones estadounidenses.

Armas de uranio empobrecido, al parecer no son categorizadas como armas nucleares”.

Todo esto, para que, a costo de millones de vidas humanas, una pandilla corporativa imperialista, una junta militar Bush, un “pueblo elegido” cristiano pueda disfrutar el Cielo en la Tierra! De paso, ¿Qué Dios es este, que permite todo esto?

Lo qué Oscar nos advierte es, que deberíamos parar cualquier intento de una invasión militar en Venezuela. En caso que esto ocurriese - y es altamente probable que pasa en el futuro más cercano, como resultado de la posición global peligrosa, desesperada y decadente de los EE.UU., que han perdido completamente el control - entonces nuestra bella Venezuela se convertirá en un pantano radioactivo, quemado y contaminado, en un desierto árido y sin vida, una amenaza letal para la vida humana, esto fue lo que pasó en Vietnam y lo que está pasando en Irak actualmente.

Los próximos en la lista son Irán y Venezuela.

Y algunos perros de la guerra incluso consideran un ataque a Irán o a otros países euro-asiáticos con bombas atómicas. En cualquier momento puede ocurrir otro incidente al estilo “Pearl Harbor” o “Torres Gemelas”, esta vez atómico, en la Costa Oeste de los EE.UU., dándole a la junta militar Bush la excusa para desatar un feroz incendio atómico al rededor del globo.

Así que Bolivarianos, ¡Tengan cuidado! Este extraño desarrollo de los eventos mundiales no concuerda con Nostradamus o con alguna “Palabra de Dios”, más bien ya fue previsto por dos mentes europeas brillantes.

En realidad, Europa misma - que es la cuna del capitalismo, de esta plaga humana, de este Moloch - a través de las obras de dos filósofos excelentes, ya explicó lo que ha pasado y lo que está pasando ahora, también cómo todo esto terminará al fin.

Los académicos Georg Wilhelm Friedrich Hegel y Karl Heinrich Marx - ambos nacidos en Alemania, el país, donde más tarde, en el siglo 20, el Nazismo iba a triunfar - en sus grandes obras “La Fenomenología del Espíritu” y “El Capital” respectivamente, nos explicaron la quintaesencia dialéctica del capitalismo, su base material, su sobre estructura, sus leyes tendenciales de desarrollo y su fallecimiento final.

De hecho, cum grano salis, Hegel explicó todo el desarrollo de la sobreestructura del modo de producción capitalista, de la Razón alias el Capital, y Marx explicó sus leyes tendenciales, la competencia, la concentración, la monopolización, la caída de las ganancias, la composición orgánica del capital, donde el trabajo físico será eliminado progresivamente de la producción, y donde las máquinas y el trabajo social jugarán el papel decisivo. El problema es, que sólo la fuerza de trabajo humana viva y explotada produce plusvalía, ganancias y acumulación de capital. Las máquinas y las computadoras no consumen, no realizan capital, ni tampoco generan riqueza y poder.

Finalmente, Marx describió la pauperización geométrica progresiva a escala mundial, dándole sólo dos posibilidades a la humanidad: Socialismo o Barbarie. Chomsky llama a este dilema: Hegemonía o Sobrevivencia. Nosotros lo llamamos: Producción o Creación, Alienación o Emancipación.

Ya el 25 de enero de 2005 advertíamos:

“La auto-defensa armada es la única esperanza que nos queda todavía contra un “Plan Colombia”, que se puede desatar en cualquier momento para agarrar nuestro agua, gas y petróleo aquí en Venezuela. Los EE.UU. urgentemente necesitan estas nuestras reservas para sobrevivir algunos años más y para poder confrontar sus competidores europeos y asiáticos a nivel económico.

Como vimos anteriormente, es un asunto de vida y muerte. No nos ayudarán muchos amigos como dijo Shakespeare: Venezolanos, Latinoamericanos, nos tocará “tomar las armas contra un mar de problemas”, que pronto no sólo vendrá “en filas aisladas sino en batallones completos”.


Bien, ha llegado este momento, estamos enfrentando a la Barbarie, a la lucha a vida o muerte de la especie humana, a la posible Aniquilación Total del “Angel” de la muerte, a la bota militar estadounidense en nuestras puertas. Europa se vuelve fascista a alta velocidad, Rusia y China se unen, sí, una guerra mundial nuclear inminente está en el horizonte. Así la sobrevivencia de la especie humana es una cuestión de sólo décadas. Las capas de hielo en los polos de la tierra se están descongelando, liberando el tóxico gas metano y contribuyendo aún más al calentamiento del planeta.

Lo que comenzó en Venezuela como “Caracazo”, luego le salvó la vida del presidente venezolano Hugo Chávez y la economía petrolera del país, lo que se está extendiendo a través de toda América Latina y el globo - la Revolución Bolivariana, con su tarea transhistórica, que es el Socialismo Científico y Filosófico y la Emancipación Humana Global - refleja los deseos, las esperanzas y los sueños diurnos más sagrados de millones de trabajadores, campesinos, intelectuales y gente de “buena voluntad”, para sobrevivir, vivir, experimentar lo Bello, conocer la Verdad, amarse uno al otro, en fin, para crear y emancipar la humanidad aquí y ahora. Esto es el verdadero y único camino concreto que le queda al Humanismo, a la Humanidad.

En la historia humana, hasta ahora, para lograr cualquier meta humana, humanitaria o humanista, teníamos que luchar duro; sin embargo, esta última confrontación beligerante, la batalla más grande que el hombre jamás ha visto, esta lucha global de clases, este “choque y terror” bárbaro yanqui, como ya fue presenciado en Palestina, Nepal, Colombia, Afganistán, Irak y pronto Irán, será la guerra mundial terrorista más sangrienta de todas.

Hiroshima y Nagasaki indicaron el terrorismo sin límites y la barbarie brutal del imperialismo corporativo estadounidense.

Si no paramos inmediatamente este terrorismo fascista global, a través de la protesta global, utilizando nuestra propia arma formidable contra todas las armas de destrucción masiva - por ejemplo, inter alia, nuestra fuerza de trabajo millonaria, organizada como fuerza de combate en una verdadera huelga revolucionaria y emancipatoria a escala mundial - entonces pronto Venezuela amanecerá con una Intervención Armada Yanqui que la sentenciará a la Barbarie y a la Alienación Total.

El “Aguila Noble” estadounidense vendrá por nosotros, uno por uno. Al final, no quedará nadie para aterrorizar. Entonces, un planeta solitario sin vida dará sus vueltas en un rincón de la Vía Galáctica, como recuerdo trágico de una entonces vida humana creativa y creadora, que al fin, como resultado de la arrogancia, el egoísmo, los vicios, la avaricia y la megalomanía se extinguió a si misma, a través de su propia maldición divina, su propio “pecado original”, el “sudor de su frente”, es decir, por su invento unilateral, peligroso y perverso del Trabajo y de la Producción, que es la Alienación per se.

En su delirio religioso ideológico, el hombre puso las cosas al revés. No se dio cuenta, que sólo después de sobrevivir la Producción, inventada por él mismo, podría comenzar la verdadera Creación Humana, la Trascendencia hacia la Emancipación Humana. A través de los tiempos, el Hombre, el Gobernante, el Jefe sólo se ha amado demasiado a sí mismo, a su propia coronación, a la lógica formal, la universalidad, la metafísica, el idealismo, el reformismo, la economía del mercado, los valores, los equivalentes, las ganancias, las guerras, la hegemonía mundial, la democracia y el capitalismo.

Dejar el Trabajo y bajar a un nuevo modo de Creación y Creatividad Humana, ahora, al pasar el punto de no regreso, sigue siendo el único y verdadero camino concreto, que nos lleva fuera de esta conflagración capitalista, imperialista, corporativa planetaria.