Franz J. T. Lee, agosto de 2005
Esto
es la razón, por qué el Presidente Chávez está
amenazado permanentemente por el magnicidio yanqui
El
Presidente Fidel Castro Ruz siempre enfatiza la relevancia histórica
de su estudio universitario de la economía política y
la manera de cómo le ayudó a él y a sus
camaradas a entender mejor el Socialismo; además, cómo
aplicar este conocimiento de manera victoriosa en la práxis y
teoría marxista y en los procesos revolucionarios cubano y
latinoamericanos. Por otro lado, aquí en Venezuela, igual que
en otras partes, tradicionalmente los básicos de la economía
política no se trataron ni en la primaria, ni en la
secundaria, ni en las universidades, y esto es algo que las
diferentes misiones bolivarianas actuales en el campo educativo
tienen que incluir definitivamente en sus programas.
Muchos
académicos todavía argumentan que la economía y
la política moderna no son interrelacionados íntimamente
- ya Aristóteles lógico-formalmente le asignó un
rol superior a la política, degradando así la economía
a una existencia subordinada e inferior - hoy día, como
resultado de la emergencia triunfante del “trabajo intelectual”
y de la desaparición progresiva del “trabajo físico”,
algunos científicos sociales incluso mantienen, que la
economía se ha integrado en la propia sobreestructura
social.
De esta manera, ideológicamente las verdaderas
funciones sociales de la política, del Estado, de la
democracia capitalista burguesa, son ocultadas frente a un público
mundial ya sometido profundamente al control mental.
Claro,
entre otros intereses dominantes, todos estos intentos se dirigen
contra la dialéctica, contra los intereses sociales de los
“condenados de la tierra”, los esclavos, campesinos,
siervos y trabajadores, contra el análisis de clase social,
contra la lucha de clases, contra el método de la economía
política; al fin y al cabo, contra el socialismo científico
y filosófico, contra el Marxismo.
Para Venezuela, para
América Latina, para la Revolución Bolivariana, que
tienen que luchar contra la explotación económica
mundial y la dominación política global en varios
niveles, grados y esferas históricos iguales, desiguales,
combinados y transcendentales, para crear el socialismo del siglo 21,
para nosotros, es obligatorio conocer y saber cómo aplicar el
método político-económico marxista, la poderosa
práxis y teoría emancipatoria, el formidable arma
social de la auto-defensa popular y del Poder Ciudadano.
Aquí,
como breve comentario, solamente introduciremos este conditio sine
qua non marxista para la construcción de cualquier socialismo
científico y filosófico hoy a escala global.
Según
Marx: “Parece ser adecuado comenzar con los elementos
verdaderos y concretos, con las precondiciones actuales, por ejemplo,
comenzar en la esfera de la economía con la población,
que forma la base y el sujeto de todo el proceso social de la
producción”.
http://www.marxists.org/archive/marx/works/1859/critique-pol-economy/appx1.htm
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Este
método revolucionario analiza la base social, el soberano, los
ciudadanos, la población de Venezuela, de América
Latina, luego se concentra en la obvia división de esta
población en clases sociales antagónicas, resultado
histórico del puntofijismo oligárquico, en aquellos que
viven cerca de la Plaza Francia, en Altamira, y aquellos que vegetan
en los barrios de las grandes ciudades y en los campos, también
en aquellos millones de personas empobrecidas, que no tienen más
nada que ofrecer que su fuerza de trabajo física barata, en un
intercambio desigual en el mercado laboral capitalista, que ya ha
reducido un 80% de ellos a la pobreza crítica y crónica,
al desempleo o sub-empleo, a niños de calle, a prostitutas, a
mendigos económicos informales y a la verdadera base moderna
de la futura creación social revolucionaria aquí en
América Latina y Venezuela, igual que en otras partes.
Si
tenemos éxito, bien!
Si no, también bien: por lo
menos, como socialistas incorrompibles habremos intentado todo lo
posible con todo nuestro poder - menos no deberíamos y más
no podemos - y por lo tanto no tendremos excusa en absoluto por no
haber dado todo, nuestras armas más sagradas, nuestras propias
vidas para salvar la mayoría de la humanidad de las garras
mortales de la Globalización y del Fascismo Mundial.
Esto
es la razón, por qué el Presidente Chávez está
amenazado permanentemente por el magnicidio yanqui!
Así
que en la economía política, después de haber
partido de verdaderas personas, que viven en una realidad global de
clases, es decir, haber partido de la población, continuemos
ahora a analizar los lagos, las lagunas, los ríos, las playas,
el gas, el petróleo, los minerales, la flora y fauna, la
biodiversidad, los diferentes sectores de la producción,
especialmente de la industria petrolera, PdVSA, las exportaciones,
las importaciones, la inflación, los precios, la producción
y el consumo anual, etc. Es precisamente eso lo que hace el
Presidente Chávez todos los domingos en su programa “Aló
Presidente”.
¿Por qué, estudiando
solamente la “población” como tal, los
Venezolanos, las personas, el soberano, los seres humanos, hasta los
“hijos de Dios”, el concepto mismo se convierte en una
mera abstracción generalizada y vacía?
La
respuesta es simplemente, porque la población entera de
América Latina está formada de diferentes clases
sociales; uno tiene que ser totalmente ciego para no notar este
fenómeno tan obvio. Sin embargo, muchos ministros, profesores,
estudiantes, incluso parte de la crema de la crema de la Izquierda
intelectual, muy pocas veces hablan o escriben sobre las severas
luchas de clase en Venezuela y América Latina. Algunos ya ni
siquiera utilizan el concepto “capitalismo”, y en vez de
usar el método de la economía política en sus
trabajos, esconden su anti-marxismo detrás de la “economía
del mercado”, su anti-socialismo detrás de una
“democracia” fraudulenta o una “democracia social”
rancia, algunos hasta esconden su ignorancia detrás de la
palabrería griega o latina.
Como tal, la economía
política misma se estancará, si no la revolucionamos
urgentemente. De hecho, cuando el Presidente Chávez siempre
habla de una “clase media en positivo”, entonces, por lo
menos seguiremos teniendo una “clase media en negativo”,
también una clase alta y una clase baja en Venezuela, cuyos
intereses de clase difieren definitivamente. Todo esto determina la
severa lucha de clases en Venezuela, que tiene rasgos
trans-históricos, anti-coloniales, anti-capitalistas,
anti-imperialistas y pro-socialistas. Que todavía no tenemos
una vanguardia socialista o incluso cuadros anti-capitalistas fuertes
que valen la pena de mencionar, no altera la esencia revolucionaria
de esos conflictos de clase sociales volátiles.
La
economía política nos enseña, que históricamente
en Venezuela, América Latina y el Caribe, las diferentes
clases sociales tienen diferentes intereses sociales, que resultaron
en violentas luchas de clase. En Europa incluso existen las luchas
dentro de las clases, algunas ya terminaron en luchas globales de
clase, en guerras mundiales fascistas inter-imperialistas, algunas
culminan en las actuales “Nuevas Guerras” de Bush, que ya
involucran a Venezuela como mayor país productor de gas y
petróleo.
Ahora, que hemos identificado las varias,
verdaderas y concretamente existentes clases sociales de Venezuela y
América Latina, descubriremos, que esas clases dentro de sí
mismas también quedan vacías, si no analizamos sus
relaciones sociales y las completamos con los factores políticos
y económicos de los cuales dependen. Algunas clases generan
amos, otras esclavos; algunas poseen los medios privados de
producción y de comunicación, otras solamente poseen
sus fuerzas de trabajo físicas; algunas tienen capital, otras
reciben sueldos, etc.
De hecho, viéndolo más
acerca, nos damos cuenta, que el capital es nada sin el trabajo
asalariado, sin intercambio de plusvalías, sin costos y
precios, y que si los capitalistas desaparecerían, entonces el
trabajo asalariado también; si no existe trabajador alguno,
ningún capitalista puede sobrevivir. Como tal aprendemos
concretamente el método dialéctico de la economía
política.
Si, tan poco que el marxismo es arcaico, como
muchos creen, tan poco son obsoletas todas esas verdades comunes, que
vivimos y vemos diariamente al rededor de nosotros. Y aún
¿quien nos enseña la economía política?
En
introducir la inmensa tarea revolucionaria de mandarnos a todos a
inventar, a experimentar y a crear el Nuevo Socialismo del Siglo 21,
el Presidente Chávez de Venezuela, de hecho nos pidió
desarrollar nuestra propia cosmovisión latinoamericana,
nuestra propia Ciencia y Filosofía venezolana, nuestra propia
Lógica global y nuestro propio Método
Político-Económico Socialista.
Este “método
científico todavía correcto”, que es
completamente válido para el análisis de cualquier
fenómeno social del actual capitalismo imperialista y
corporativo - como verificó globalmente Ernest Mandel en sus
tres excelentes tratados económicos - Marx mismo, hace más
que 140 años, lo describió de la manera
siguiente:
“Los economistas del siglo 17, por ejemplo,
siempre tomaron como punto de partida el organismo vivo, la
población, la nación, el Estado, varios Estados, etc.,
pero sus análisis al fin y al cabo siempre les llevó al
descubrimiento de algunas relaciones generales decisivas abstractas,
tales como la división del trabajo, dinero y valor. Cuando
esos factores separados fueron más o menos deducidos y
establecidos, fueron desarrollados los sistemas económicos,
los cuales, desde conceptos tan simples como el trabajo, la división
del trabajo, demanda y valor de intercambio, avanzaron a categorías
como el Estado, intercambio internacional y mercado mundial. El
último es obviamente el método científico
correcto”.
Marx explicó, que ninguna estructura
social cambia radicalmente, si no se han realizado y materializado
todas sus posibilidades; sólo entonces, las relaciones
productivas reinantes, las relaciones de propiedad, se convierten en
cadenas de las fuerzas productivas, y sólo comenzando a
romperlas, el viejo modo de producción se vuelve obsoleto y
comienza una nueva época de revolución social.
Lo
anterior, más que nunca vale para América Latina y
Venezuela, para la Revolución Bolivariana, pero incluso más
para el marxismo y el socialismo mismo. En la Globalización
están dadas las condiciones y los factores objetivos,
subjetivos y “transjetivos”, como fue explicado en el
Manifiesto Comunista, para la Revolución Mundial Permanente,
para el Socialismo del siglo 21.
La verdadera prueba de fuego
emancipatoria para el marxismo termina de empezar. La Revolución
Bolivariana no debería confundir las caricaturas
“real-existentes” con ciencia revolucionaria y filosofía
emancipatoria, no debería tomar “democracia social”
o “democracia verdadera” por Socialismo y no debería
cambiar la realidad del método político-económico
marxista por la meta-física virtual platónica
cristiana.
Para sobrevivir los actuales feroces ataques
yanqui, tenemos que actuar, pensar y sobrepasar nosotros mismos
nuestro Socialismo del siglo 21, todo de, por y para nosotros
mismos.
Sólo después estaremos en una posición
de unirnos e integrarnos con todos los demás experimentos y
proyectos socialistas marxistas y no-marxistas a nivel global.
Una
cosa es cierta, no permitiremos que nos invadan con otra Conquista
Intelectual Metropolitana y otro Holocausto Mental del Norte.
En
conclusión, permitámosle a Marx mismo la explicación
de esta verdad revolucionaria, la feroz batalla de las ideas y lucha
de clases entre la ideología capitalista del Norte y la teoría
socialista del Sur, cosa que es tan fundamental para las tareas
inmediatas de la Revolución Bolivariana:
“La
religión cristiana fue capaz de contribuir a un entendimiento
objetivo de las tempranas mitologías sólo después
de que su auto-crítica fue preparada hasta cierto grado, como
lo fue potencialmente. De manera similar, sólo cuando la
auto-crítica de la sociedad burguesa había comenzado,
la economía política burguesa fue capaz de entender la
economía feudal, antigua y oriental. En cuanto la economía
política burguesa no sólo se identificó con el
pasado de una manera mitológica, su crítica de las
economías más tempranas - especialmente del sistema
feudal contra el cual todavía tenía que luchar
directamente - pareció a la crítica que el cristianismo
dirigió contra el paganismo, o que el Protestantismo dirigió
contra el Catolicismo”.
Esta llave maestra marxista del
entendimiento de la economía política socialista, de la
práxis y teoría revolucionaria permanente, es
simplemente la auto-crítica humana; es saber, que la Libertad
Latinoamericana es la visión científica y filosófica
de una Necesidad Humana global emancipatoria, lo mismo que Rosa
Luxemburgo entendió cuando dijo, que “la libertad es
siempre y exclusivamente la libertad para aquel, que piensa
diferente”.
Para nosotros en Venezuela, esto significa
dar nuevos pasos revolucionarios originales, para formular las
correpondientes ideas, palabras y teorías nuevas. Tenemos que
entender, qué significa el prefijo “in” y la
plabara “adentro” dentro del orden mundial globo
fascista, para comprender, qué signifíca
“in-formar” o “in-volución” y qué
es “in-formación” sobre la revolución.
Sólo
así podemos emprender nuevas acciones, que nadie emprendió
nunca antes hasta ahora, y podemos crear nuestros propios conceptos
científicos y filosóficos correspondientes, tales como:
transhistoria, triferencia, transvolución, exformación
o exvolución. Sin embargo, no deberíamos olvidar que la
verdadera rosa de la emancipación (Rosa) es el verdadero
concepto, como ya lo indicó Shakespeare, a través de
los siglos, no importa cual nombre le damos, siempre olerá
igual de dulce.